domingo, 5 de abril de 2009

Discurso de graduación-Santa Catalina-1999

Muchas veces navegamos juntos al arrullo de las olas, el presente de hoy, mañana será pasado y desearemos retener en nuestra mente los gratos momentos del ayer. Hoy hay que abrirle paso a la nostalgia y al adiós, es inevitable pero no debe ser motivo de tristeza el tener que abandonar el lugar en el que crecieron juntos sin darse cuenta, en el lugar donde dejaron regadas sus risas y sus lágrimas, sus sustos y sus temores, sus rabias, sus impulsos, el lugar donde día a día construyeron paso a paso sus sueños e ilusiones, donde aprendieron a amar y a odiar, donde finalmente se convirtieron en hombres y mujeres.

Es la hora de partir, tomar rumbos distintos, otras metas los esperan, seguiremos unidos por el recuerdo pero nuestras vidas irán caminandootros lugares; Bucaramanga,Barranquilla o Cartagena, Riohacha o Valledupar, Bogotá o Medellín o quizás más lejos en otros países; sólo nos quedará la esperanza de reunirnos en el futuro e intentar armar a través de los recuerdos el mapa de nuestra experiencia compartida. Hoy tenemos que decirnos adiós, hoy tienen que irse, como cuando un baile termina, es la hora de levar anclas e izar las velas, es la hora de partir y no es motivo de tristeza, es la hora de celebrar el triunfo que obtienen, sentirse felices y contentos y disfrutarlo sin límites.
En este momento los invito a pasar la vista por el pasado, el examen de admisión, su época de reclutas, las guerras de papel y tiza, las travesuras a los profesores, los sudores en nuestra malogrado cancha, la lucha por comprar en medio de la bulla y el desorden de la tienda escolar, observen las paredes de su colegio que les pareció tan grande en el primer año, respiren su aire, escuchen de nuevo sus gritos, sus súplicas, sus desórdenes , sus clases, sus excusas, su patio salpicado eternamente de papeles, bolsas y charcos, recuerden cada pedazo de vida que dejaron hora tras hora, en este lugar que los acogió con cariño y que hoy debe decirles adiós, es la hora de partir.

Atrás quedarán los recuerdos, la miniteca con todas sus luchas por el porcentaje, la hermosa experiencia de Santa Marta, el sufrimiento en la clase de química, sus figuritas de jabón que me sirvieron para lavar los platos, el M´cnairs cómplice de todas las fiestas, la foto de Lina, la glotonería y agresividad de Armando, el orgullo y los peros de Oscar, las palabras enredadas de Luz Derys, la alegria de Marelvis y Maricruz, la paciencia de Johanna, la responsabilidad de Ludis, la admiración por "el Che" de Práxeres, el romanticismo de Carmen, el señor Padilla, los sustos con Keyla, el mayor puntaje, los ojos de Adriana, el cabello de Liliana, el ingenio de Verónika y su pelea con Ibáñez, los 254 votos de Viviana, la viejita de Fadia, la unión de las K-trines, el drama de la nacionalidad de Yuris, la guerrillera deLeydis, el ego de Janner, las Chichis, los Jackson, las palabras de Betcy, la beca de Beiza, el trofeo de bailarines de Jeison y Kate Pernett, el celular de Juan Pablo, las lágrimas de Yeleris, la viveza de Luis Carlos, el baile de Dickson, las ganas de matar profesores de Jean Blair, el drama sentimental de Jasveidy, la amistad de Viviana, el temor a los golpes de Euclides, Edulfito, la amistad de Eduardo, el ingenio de Ingrith, la astucia de Yolanda, las chips, la religión deJesley, el silencio de Sugey, les aseguro que fueron, son y serán inolvidables, sólo espero ser inolvidable para ustedes , ese fue mi afán.

Es la hora de partir y mirar al frente, los hombres y mujeres verdaderamente grandes se caracterizan por su actividad en pro de la humanidad, de nada sirve la inteligencia y el saber si es utilizado para hacer daño. No es hora pues de sentirnos tristes porque nos vamos, arriba esos corazones, ustedes son grandes, el mundo los espera, que nuestro quehacer cotidiano no haya sido en vano.
Adelante como guerreros poniendo la frente en alto, dejen que soplen los vientos, que quemen los soles, que azoten las tormentas, que mojen las lluvias, que todo es les enseñará a ser fuertes. Recuerden siempre que para levantarse, primero hay que caer y que en el arte de vivir, el hombre es al mismo tiempo el artista y el objeto de su arte, es el escultor y el mármol, el médico y el paciente.
Adiós jóvenes y mis mejores deseos de triunfo en sus estudios, en su profesión, en su familia, en fin....en su vida.
Ulysses, el héroe de nuestro tiempo a finales del siglo XX....